¿Qué es el método BLW? Baby Led Weaning

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20/09/2023 | Actualizado: 07/10/2023 20/09/2023
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¿Qué es el método BLW? Baby Led Weaning
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El Baby Led Weaning es un método de alimentación del bebé que se implementa cuando termina el periodo exclusivo de lactancia materna, a partir de los seis meses. Tiene beneficios que conquistan a padres y madres, y también a los/as pediatras, aunque hay que saber cómo hacerlo.

Está claro que los métodos y técnicas de crianza y educación infantil van evolucionando. La estimulación que tienen los niños hoy día es muy diferente a la que tenían sus padres, más aún sus abuelos, pero favorecen su autonomía y son respetuosos con sus tiempos de desarrollo y sus necesidades.

¿Qué es la Baby Led Weaning (BLW)?

Su traducción literal del inglés sería “destete dirigido por el bebé”, lo que ya apunta a que será él/ella quien lleve la iniciativa. El BLW en bebés es una forma de introducir alimentos después del periodo de lactancia en exclusiva. Deben estar adaptados en tamaño, temperatura y textura para que el pequeño pueda comerlos utilizando sus manitas y su boca.

El BLW permite saltarse la fase de purés y papillas. Estas exigen un trabajo más activo por parte de los adultos, mientras que el niño se limita a abrir la boca y tragar. En cambio, con el BLW los niños tocan, estrujan o comen los alimentos como quieran.

Se calcula que estará listo para implementar el método sobre los seis meses, según su desarrollo. Dos claves: que tenga buen control de la estabilidad y el movimiento de su cabeza, y que sea capaz de sentarse solo.

¿Cuáles son los beneficios del método BLW?

  • Es más útil para tomar conciencia sobre los alimentos: su aspecto, su tamaño, su textura, su sabor, su olor y la variedad.
  • Más efectivo para el desarrollo sensorial, de habilidades cognitivas y motrices, de la coordinación ojo-mano y de los músculos faciales. Sentará las bases para destrezas posteriores, como dibujar, escribir o hablar.
  • Aprenden mejor sobre los alimentos, lo que les permitirá ser selectivos en el futuro. Además, tendrán mayor control sobre el apetito.
  • Al experimentar con la comida por sí solos, los bebés disfrutan más. Es una forma más efectiva de que conozcan su propio mundo.
  • Fomenta hábitos saludables, ya que las primeras experiencias del niño con la comida son con alimentos naturales, sin azúcares, sal ni otros aditivos.
  • Ganan confianza en sí mismos, al observar sus propios logros.
  • Comen en la misma mesa los mismos alimentos que los adultos, o similares, lo que les permite hacerse con el ritual de las comidas y la socialización que tiene lugar en torno a ellas. Eso contribuye a reforzar el vínculo familiar.
  • Ganan autonomía, lo que también es un bálsamo para los padres. La vigilancia debe ser permanente, sí, pero se acabaron los juegos tipo avioncito y otros con los que engañar al bebé y que coma. Puede resultar desesperante y convertir las comidas en una batalla.
  • Permite el ahorro familiar, ya que no hay invertir tanto en alimentos específicos.

¿Qué riesgos tiene el método Baby Led Weaning?

Atragantamiento o asfixia:

Ten presente que vas a proporcionar alimentos al bebé en un estado natural, o lo más natural posible, cuando ni siquiera tiene todos los dientes (incluso puede que no tenga ninguno). Hay que evitar darle trozos demasiado grandes o duros, si no alimentos blandos, cocidos y/o cortados en forma de bastón o palito que pueda agarrar bien y morder con las encías.

Y no te relajes. Que los bebés ganen autonomía, y tú no tengas que preparar toda clase de juegos de engaño para que coman, no significa que no necesitan vigilancia constante. Hazte presente, como con él y no lo distraigas con juguetes y pantallas. Conviene que aprendas técnicas de primeros auxilios por si hay algún pequeño accidente.

No te preocupes en exceso. El niño está experimentando, por lo que en esta etapa son frecuentes las náuseas o la tos. Sus reflejos son lo bastante sensibles ante posibles atragantamientos, y poco a poco irán aprendiendo qué pueden masticar y tragar y qué no. En cambio, si el alimento obstruye las vías respiratorias hay riesgo de ahogamiento, lo que es más grave.

Déficit nutricional:

La ferropenia, que es el déficit de hierro, es el más veces observado en bebés que practican BLW. También puede haber deficiencias de zinc, calcio u otros nutrientes.

Por eso es tan importante introducir variedad en la alimentación, en función de su crecimiento, sus necesidades y las habilidades que vaya adquiriendo. Debe comer cereales, legumbres, frutas, verduras, carne, pescado, lácteos, etc., y, si no es posible que los coma enteros, habrá que dárselos molidos o en crema.

Eso explica que se aconseje mantener la lactancia materna, que seguirá siendo una fuente importante de nutrición.

Contaminación o intoxicación alimentaria:

En principio, no tiene que correr más riesgos que cualquier adulto de ingerir alimentos en mal estado. Pero, como el bebé es más desordenado comiendo, sí se incrementan riesgos de suciedad o contaminación.

Para evitarlo, hay que lavarle bien las manitas antes y después (los adultos también), lavar bien los alimentos crudos, cocer los que se requieran y conservarlos correctamente. Es mejor esperar para darles alimentos delicados, como el huevo o los que contengan gluten.

La superficie sobre la que comer también es importante. Una buena trona será tu gran aliada, porque facilita que el niño permanezca sentado de modo seguro y, además, tiene bandeja hecha con un material hipoalergénico y que actúa como barrera. Además, es muy fácil de limpiar.

Recomendaciones para la alimentación complementaria BLW

El BLW no es darle alimentos al bebé para que coman solos, no. Para extraer sus beneficios, requiere buena planificación. Sigue las recomendaciones de especialistas para implementar con éxito, entra las que suelen estar estas:

  • Hazte con una buena trona. Está plenamente adaptada a su nivel de desarrollo y a sus necesidades, así que facilitará mucho las comidas. Pon en la bandeja los alimentos que debe consumir y déjalo experimentar.

  • Comienza con alimentos blandos, fáciles de masticar y tragar. Córtalos en bastones o palitos. Los que sean muy pequeños, duros o pegajosos estarán descartados.
  • Ten cuidado con la temperatura si tienes que cocer. Ni muy calientes ni completamente fríos.
  • Opta por alimentos naturales, nada de ultraprocesados, y no añadas, sal ni azúcar.
  • Introduce variedad: plátano, pera, melón, zanahoria, aguacate, patata, brócoli, coliflor, judías verdes, arroz, pasta, pollo, salmón, queso fresco… Introduce un alimento nuevo cada dos o tres días. Aquellos que sean delicados por el riesgo, como los frutos, se los puedes dar molidos o en crema.
  • Ofrécele agua para beber. Le ayudará en la ingesta de alimentos sólidos, no tanto para hidratarse. Para eso ya tiene la leche materna.
  • Respeta sus tiempos y sensaciones. Si no come más, no le obligues, puede que ya esté saciado.
  • Vigila en todo momento.
  • ¡Ten paciencia! Te habrán enseñado a ser limpio y ordenado, y al principio te costará contenerte para no limpiar a cada momento. Ya te advertimos que el niño se pondrá perdido, pero debes controlarte. Limpia después. Si usas la trona, no te costará nada.

Te animamos a practicar el Baby Led Weaning por sus múltiples ventajas, que se ven tanto durante la implementación como a corto y medio plazo. Porque se trata de comer para nutrirse, sí, pero también de aprender y alcanzar el placer que genera la comida, solo que con alimentos saludables.